FORMAS DE NACER

Noel Moreno 

Recuerdo que antes que naciera mi última hija , allá por el 2015, dos o tres personas (madres también) me preguntaron dónde iba a nacer, a lo cual mi respuesta sin cuestionarme ninguna otra fue «en la mutualista». Hoy, casi 4 años después, veo el trasfondo de la pregunta. Dado que parecen estar de moda términos tales como «volver a las raíces» «parto humanizado» «nacer mejor» , se me ocurrió recurrir a algunos contactos para investigar sobre ello. ¿Es realmente una moda o es un cambio de paradigmas sobre el nacimiento? ¿Seria deshumanizada la forma que nacieron mis tres niños ( en mutualista y por cesárea)? ¿A qué se debe esta nueva/vieja concepción del nacimiento? 
Tatiana Gómez , doula (otro término relativamente nuevo para mi, ya que lo incorporé hace aproximadamente 5 años) me cuenta de qué se trata, explicándome que las doulas existen desde el inicio de los tiempos, a lo largo de la historia y en casi todas las culturas, las mujeres han parido acompañadas de otras mujeres además de la partera y se puede ver reflejado en todo tipo de pinturas y esculturas artísticas.
¿Que hacían esas antiguas doulas?
Las madres han sido cuidadas en el puerperio y han criado en tribu y desde siempre a otras. Mujeres con más experiencia, acompañaron a las nuevas madres en el camino del nacimiento.
El origen del término “doula” es griego y podemos traducirlo como “la que sirve a la mujer”. 
Esto me llevó, indefectiblemente a otras interrogantes;
¿Y de dónde proviene en la actualidad? ¿Por qué resurge ese rol?
Empezó a usarse el término "doula" en los años 70 cuando los doctores Klaus y Kenell descubrieron casi accidentalmente, que la presencia de una mujer con experiencia, pero que no fuera profesional médico, en las salas de parto, acompañando a la mujer, disminuía la intervención y aumentaba el contacto entre la mamá y el bebé.
Los progresos y avances médicos en cuanto a la atención al embarazo y parto han sido enormes en este último siglo, pero la excesiva tecnificación, el intervencionismo y los protocolos rígidos, junto a la falta de mirada hacia la madre, han descuidado una parte muy importante, las emociones.
Y las emociones son muy importantes en esa etapa vital.
El parto y el puerperio son, de los momentos más emocionantes y vulnerables que atraviesan las mujeres y las familias. Por lo cual se observan múltiples beneficios en el cuidado y atención de la mamá en esa instancia.
Esta comprobado que el cuidado de la atención emocional hace que la mujer se responsabilice, se implique y se sienta más segura, trabaje sus miedos, busque información, se sienta parte activa y más unida emocionalmente a su bebé y a los cuidados que éste requiere.
Y aqui llega el papel de la "doula", en la actualidad surge dando respuesta a una necesidad y a una demanda de las nuevas madres, que quieren los mejores cuidados físicos, pero también necesitan refuerzos emocionales, compañía en el camino y sentirse poderosas.
Frente a estas ideas tan amorosas y reconfortantes desde la maternidad, me pregunto, entonces, ¿Se puede sustituir un médico, partera, etc, por una doula? ¿Por un parto en casa y no en un sanatorio? Tatiana responde que se debe tener en claro lo que no es una doula:
La doula no es profesional médico, no desplaza a la pareja, ni es un ser querido.
Tiene una distancia justa que permite a la mujer abrirse con confianza.
Las doulas no participan en tareas clínicas como tactos vaginales o monitores, no diagnostican ni proyectan sus deseos. No aplican protocolos, si no que el fin de la labor de la doula es, atender, respetar y acompañar por encima de todo a la madre, considerando que su camino es único y es suyo. Su labor es acompañar y empoderar a la mujer-madre que transita esa etapa.
Luego de conocer un poco esta realidad, muy distinta a la que me tocó vivir como mamá en el momento del nacimiento de mis hijos, una sensación de armonía y de re-coneccion con las raíces me invade. 
Me conmueve que haya un movimiento por el cuál cada fami
Me conmueve que haya un movimiento por el cuál cada familia pueda tener un parto amoroso, tranquilo y humanizado, pero por otro lado creo que los avances técnicos y médicos han pisibilitado la vida en muchss ocasiones que de otra manera no hubiera sido posible (en mi caso), sin naturalidad y por cesárea, agradezco también que exista esa opción. Tal vez la respuesta está en encontrar un punto intermedio, que conjugue la humanización, la armonía de lo natural, con las ventajas de los avaces médicos... en fin, para los que aún se encuentran en esa etapa de búsqueda de un «nacer mejor» espero que puedan llegar a ello de la manera más respetada posible.